Reseña: Misery

Misery

Stephen King

DeBolsillo / 9.95€

     Misery es un relato obsesivo que sólo podía escribir Stephen King. Un escritor sufre un grave accidente y recobra el conocimiento en una apartada casa en la que vive una misteriosa mujer, corpulenta y de extraño carácter. Se trata de una antigua enfermera, involucrada en varias muertes misteriosas ocurridas en diversos hospitales. Esta mujer es capaz de los mayores horrores, y el escritor, con las piernas rotas y entre terribles dolores, tiene que luchar por su vida.

     Jamás pensé leer una novela de Stephen King. No es mi estilo. No veo ni siquiera películas de este estilo. ¿Por qué decidí a leerlo? Mi queridísima Laura Tejada (La vieja Morla) empezó a fangirlear mucho sobre el libro y no pude reprimir mi curiosidad. 
     El libro empieza con nuestro protagonista, Paul, un escritor que se hizo famoso por su saga Misery. Él está harto de esos libros, considera que son los peores que ha podido escribir y quiere cambiar eso. A causa de ello toma unas decisiones que le llevan a sufrir un horrible accidente. Al despertar se encuentra en la casa de Annie, una antigua enfermera. Paul tiene las piernas rotas, no puede moverse y para su desgracia su única compañía es Annie.

     Este es uno de los libros que más horror, miedo y ansiedad te pueden dar. Ya sé que he dicho que es mi primera novela del género, pero simplemente por cómo está escrito, el realismo que tiene ya puedes saberlo. Porque, al fin y al cabo, ¿qué da más miedo que la realidad? Que el protagonista sea escritor ayuda mucho a dar este realismo. Siempre compara lo que pasa, sus decisiones y los resultados con los de un libro (si esto fuera una novela tal cosa hubiese salido bien pero esto es la realidad y no es así). La ansiedad te acompaña todo el libro, solo quieres que Paul escape, que no sufra, que Annie no le haga daño, pero nunca funciona. 

    Annie tiene problemas mentales, es algo que vemos desde el principio. La forma en la que habla, actúa y se mueve. No hay nada en ella que no infunda respeto y miedo, mucho miedo. Se proclama a ella misma la fan número uno de Paul y de su saga Misery. "Cuida" de Paul cuando le encuentra en el accidente pero su mente enferma le hace ver el mundo desde un punto de vista narcisista. Nada le impide castigar duramente al protagonistas incluso de cosas de las que no tiene ninguna culpa *SPOILER: la escena en el que le rompe (aún más) una pierna con un bate de béisbol y se va sin darle ningún tipo de medicamento o, por supuesto, la escena donde le corta la pierna a hachazos para que él no se escape. En esas dos escenas casi se me sale el corazón. FIN SPOILER*. Paul poco a poco se va sumiendo en la locura, una locura producido por todo el sufrimiento. 

     Nunca podré describir bien la impotencia y tensión que sentí. De principio a fin lo he sentido y en ningún momento desaparecen. Las paranoias y miedos del protagonista se convierten en los tuyas propias. Las ganas de dejar de leer el libro por miedo a que vuelva Annie y siga haciendo sufrir a Paul pero a la vez no quieres parar, quieres saber como sigue, quieres acabar con Annie tanto como el protagonista. 
     En definitiva es una novela de 10. Aunque hay solo 2 personajes (hay unos pocos más pero apenas aparecen), Stephen King los ha sabido llevar de maravilla. No solo está la dificultad de los personajes sino que también está el entorno. La gran parte de la novela ocurre en la habitación en la que está prisionero Paul. Con tan pocos recursos King ha demostrado ser un verdadero genio. 

LYLA